Un conductor estresado no está en las mejores condiciones para poder conducir con seguridad, ya que las exigencias del tránsito lo excederán fácilmente, aumentando la tensión y el malestar interior.
Algunas dificultades mientras se maneja como la congestión, el auto que lo antecede circula a menor velocidad, semáforo en rojo, entre otras; pueden causar excesivo estrés y ansiedad más aún si se encuentra apurado.
Conducir un vehículo no sólo requiere de concentración y practica sino de paciencia. Lo contrario provoca a veces que se ejecuten maniobras peligrosas que pueden ocasionar accidentes de tránsito.
A fin de conocer más sobre el tema, te invitamos a visualizar y comentar el siguiente video:
Saludos cordiales,
Oficina Ejecutiva de Información y Documentación Científica.
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