La pandemia del COVID-19 trajo consigo una gran necesidad de conocimiento sobre la enfermedad y una de las fuentes de información más cercanas y de fácil consulta son las redes sociales; sin embargo esto origina una infodemia o exceso de información entre verdaderos y falsos que causan confusión a toda la población.
Las noticias falsas o como son conocidas por su terminología inglesa “fake news”, se podrían clasificar en dos grupos; la disinformación (información falsa creada con el propósito de hacer daño a alguien) y la misinformación (información falsa que es compartida pero sin la intención de causar daño a nadie).
Entre los principales factores para la difusión de noticias falsas está el altruismo. Cuando el altruista considera que la información que acaba de llegar a sus redes contiene datos valiosos y necesita ser compartida, con la intención de ayudar, la difunde; sin embargo en muchos casos llega a compartir información falsa pero sin la intención de hacer daño.
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