La radiación solar es una onda electromagnética que viaja desde el sol a la tierra, se compone de rayos UVA y UVB. La exposición prolongada al sol conlleva una gran cantidad de riesgos, los que incluso pueden llegar a ser mortales.
Los niños y ancianos son los más vulnerables.
Las consecuencias conllevan a quemaduras, lunares, pecas, insolación, fotoenvejecimiento, fatiga y cáncer de la piel y ojos, entre otros. Existen diversas medidas para protegerse, como usar ropa ligera, protector solar, exposición solar en horas centrales del día.
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