Son diversos los tipos de alcohol que existen. El consumo excesivo del alcohol etílico, que se usa para la preparación de bebidas alcohólicas, podría resultar perjudicial para las personas; sin embargo, si se consume el alcohol metílico o metanol, que se suele usar en productos de limpieza, disolventes de pintura o pegamentos podría resultar más perjudicial ya que NO ES APTO PARA EL CONSUMO HUMANO.
Lamentablemente, en algunas ocasiones se utiliza este último por falta de información o de forma ilegal para producir bebidas adulteradas, ya que resulta ser más barato. Incluso algunas marcas comerciales han sido penalizadas por contener este tipo de alcohol.
Su consumo es altamente tóxico y letal. En adultos, solo 60 ml (4 cucharadas) es mortal. Los síntomas que se observan son variados. Lo común son fuertes dolores estomacales, náuseas y dolor de cabeza. En varios casos también se ha observado ceguera, convulsiones y hasta paro respiratorio.
La intoxicación por alcohol metílico debe tratarse de inmediato. Es peligroso querer expulsarlo del organismo a través del vómito, lo que podría causar más daño aún al estómago y esófago. De preferencia se debe acudir de inmediato al hospital. Su expulsión se hará con equipos especiales y se administrará un antídoto de acuerdo con la evaluación del paciente.
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